No me avergüenzo de pedir ayuda. Nadie es tan fuerte como para no necesitarla en algún momento.
Es cierto que puede haber quién tome ese pedido de auxilio como debilidad e intente sacarle partido, pero es seguro que hay alguien que me quiere en serio y está siempre dispuesto a ayudar.
Pedir ayuda no es señal de debilidad sino de inteligencia: significa que hemos aprendido a reconocer nuestros propios límites y nos dimos cuenta de que necesitamos al otro para continuar.
Leído en la apertura del programa 147
lunes, 19 de marzo de 2012
martes, 6 de marzo de 2012
Eximio
Cuando aquel guitarrista alcanzó su notable técnica, todos comenzaron a referirse a él como un ejecutante eximio.
El día en que se supo que había matado a un colega por celos, todos comenzaron a referirse a él como un ejecutante exhumano.
El día en que se supo que había matado a un colega por celos, todos comenzaron a referirse a él como un ejecutante exhumano.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)