jueves, 21 de octubre de 2010

Perderse

Perderse en lo obvio es tal vez la peor forma de perderse.

Cuando todo cae de maduro y sin recogerlo, lo miramos de lejos, tratando de aguzar la mirada para ver mejor, -sin reconocer lo que el corazón ya vio bastante claro-, doy por seguro que estaríamos matando al amor.

Si nos tocara escuchar en una de estas noches, como en esos cuentos de chicos, al viejo sabio de la aldea, seguramente diría que también se puede perder de vista aquello que está muy cerca, si es que no miramos con otros ojos.

Porque perderse en lo obvio es seguramente la peor forma de perderse.

Leído en las aperturas de los programas 157 y 436